Ciudad de México, 28 de octubre de 2021
- Para miles de ciudadanos viajar rumbo a su trabajo, su escuela, su hogar, representa viajar con miedo, con temor y preocupación de ser víctimas de la delincuencia, y de ver afectado su patrimonio, su integridad física, incluso su vida.
Con el fin de combatir y erradicar de manera contundente el robo perpetrado en el transporte público, el diputado José Antonio García García, presentó iniciativa que reforma el Código Penal Federal y el Código Nacional de Procedimientos Penales, para que el robo en el transporte público se catalogado como delito grave e incluso dentro del catálogo de delitos que ameriten prisión preventiva oficiosa, además con penas de hasta 15 años de prisión para quien cometa dicho ilícito.
Destacó que viajar en el transporte público no debe de ser inseguro, ni angustiante para los ciudadanos. “Con esta reforma se pretende que viajar en el transporte público sea seguro y se realice de manera tranquila y pacífica para todos los ciudadanos”, agregó.
Señaló que, de acuerdo con datos del Instituto de Geografía de la UNAM, a nivel nacional se realizan diariamente 130 millones de viajes, de los cuales cerca del 80 por ciento se efectúan en transporte público.
“Ante las condiciones de inseguridad permanentes que actualmente prevalecen en el país, resulta necesario desincentivar la comisión del delito de robo en el transporte público, a través de acciones efectivas y contundentes en beneficio de los mexicanos”, precisó.
El legislador indicó que el robo a transporte público es uno de los delitos de mayor impacto social en el país y que se ha convertido en un verdadero cáncer para los miles de usuarios que se trasladan y utilizan el transporte público, ya que siete de cada diez personas se sienten inseguras al viajar en este medio de transporte.
“Cada día es más común y frecuente ver videos compartidos en las diferentes plataformas sociales donde los delincuentes con lujo de violencia despojan de sus pertenencias a los usuarios de dicho transporte, sin importar si son mujeres o personas de la tercera edad. Y que, de resistirse al asalto, no solo pierden sus pertenencias sino incluso la vida”, finalizó.
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