Ciudad de México, 10 de noviembre de 2022

TRANSCRIPCIÓN DE LA INTERVENCIÓN DEL DIPUTADO ENRIQUE GODÍNEZ DEL RÍO, PARA PRESENTAR SU RESERVA AL DICTAMEN CON PROYECTO DE PRESUPUESTO DE EGRESOS DE LA FEDERACIÓN PARA EL EJERCICIO FISCAL DE 2023.

DIPUTADO ENRIQUE GODÍNEZ DEL RIO: Gracias. Con su permiso, señor presidente. Sabemos que a la cuarta T le encanta las consultas populares, por cierto, bastante costosas, pero hoy les traigo una propuesta que no pueden rechazar: hacer una consulta popular a los trabajadores del campo.

Y la pregunta sería: ¿Les gustaría que el presupuesto asignado a los megaproyectos de esta administración se destinaran mejor a programas que apoyen el campo para que tecnifiquen sus parcelas, para que tengan mejores sistemas de riego y modernización de canales, presas y acuíferos, para que tengan mejores y mayores cosechas, para proteger sus cosechas ante desastres naturales, para que sus hijos puedan quedarse a cultivar sus tierras y lo vean como un negocio redituable para sacar adelante a sus familias? Y estoy seguro que a mano alzada votarían a favor del campo y no, y no a sus megaproyectos.

El Programa Producción para el Bienestar, que tanto presumen, no ha dado los resultados prometidos, equivale a menos del 10 por ciento del monto que asignaron a los megaproyectos. La refinería, cero emisiones, porque no refina. Un aeropuerto que no tiene aviones. Y un tren que destruye la selva maya y contamina sus acuíferos.

¿Cómo, cómo mejoría nuestro campo? Se reactivaría la economía de las zonas rurales que han sido abandonadas por falta de oportunidades, regresarían esos 4 millones de michoacanas y michoacanos que viven fuera de nuestro estado, siendo jornaleros, porque no están sembrando sus propias tierras.

Reduciríamos nuestra dependencia de las importaciones de granos, alcanzaríamos la soberanía alimentaria tan anhelada, mejoraría la calidad de vida de las familias en las zonas rurales, tendríamos un campo más competitivo, más tecnificado y con prácticas más respetuosas con el medio ambiente.

Estaríamos preparados para enfrentar plagas, sequías e inundaciones. Seríamos uno de los países líderes en exportaciones de productos agrícolas.

La producción de granos básicos es hoy más importante que cualquier otro insumo. La crisis climática, la pandemia, la inflación, las guerras, todas son factores que han golpeado fuertemente a nuestros productores.

Es urgente darle al campo su papel prioritario, pues con tristeza y coraje observo que este dictamen que hoy nos presentan no es congruente con las necesidades de los casi siete millones que trabajan en este sector primario y que alimentan a 126 millones de mexicanas y mexicanos.

Antes de votar los invito a considerar lo siguiente: el 19 por ciento de los hogares mexicanos dependen económicamente, de manera directa o indirecta, del sector primario. Para solucionar la crisis hídrica que vivimos y garantizar el derecho humano al agua, y a una alimentación de calidad, es fundamental atender la agricultura para hacerla más eficiente y sostenible.

La mitad de la población rural se encuentra en situación de pobreza y requiere de programas de apoyo, mismos que han venido desapareciendo. En este sexenio se han eliminado 24 programas en este sector, como el apoyo a pequeños productores, a la comercialización, a la inversión, en equipamiento, infraestructura, el desarrollo de capacidades y el acceso a tecnología.

Y si fuera poco, la Secretaría de Hacienda ya no les otorga financiamiento a los campesinos ni un seguro para proteger su producción. Y en la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural solo sobreviven siete programas presupuestales.

Por eso les pido el apoyo en cuatro programas: Apoyo a la inversión en equipamiento e infraestructura, Productividad y competitividad agroalimentaria, Fomento a la agricultura, Apoyo al cambio tecnológico en las actividades agropecuarias, rurales, acuícolas y pesqueras. Es cuanto, señor presidente.