TRANSCRIPCIÓN DE LA DIPUTADA ADELA RAMOS JUÁREZ PARA REFERISE A LOS 28 AÑOS DE LA FIRMA DE LOS ACUERDOS DE SAN ANDRÉS LARRÁINZAR.

14 de Febrero de 2024

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Ciudad de México, a 14 de febrero de 2024

 

TRANSCRIPCIÓN DE LA DIPUTADA ADELA RAMOS JUÁREZ PARA REFERISE A LOS 28 AÑOS DE LA FIRMA DE LOS ACUERDOS DE SAN ANDRÉS LARRÁINZAR.

 

DIPUTADA ADELA RAMOS JUÁREZ (AJR).- Con la venia de la Presidencia.

 

Buenos días, compañeros, compañeras, legisladores, pueblo de México y quienes nos siguen a través de las plataformas digitales.

 

Feliz 14 de febrero, amor y corazón por México. Este próximo 16 de febrero se cumplirán 28 años de la firma de los acuerdos de San Andrés Larráinzar, orgullosamente mi distrito en Chiapas.

 

Entre el Gobierno mexicano y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, este hecho marcó un acto y un después en la historia de México y de Chiapas, y no solo haciendo un cese al conflicto armado, sino una serie de condiciones con una nueva dimensión al conjunto de derechos sociales de la población indígena de México.

 

Asimismo, la reivindicación histórica de las comunidades que más habían sufrido por la exclusión social, la discriminación, el racismo, la pobreza y la desigualdad.

 

Una realidad silenciosa que lastimaba lo más profundo de nuestro México indígena y hoy a 28 años sigue lastimando aún los temas pendientes.

 

Hacia la concretación de estos acuerdos, el Partido Acción Nacional participó de manera positiva y dinámica de la Comisión de la Copala, a través de un querido y recordado guía, Don Luis H. Álvarez, que conjuntaron esfuerzos con muchos actores a favor de esa anhelada paz.

 

Derivada de estos acuerdos, se llevaron a cabo reformas en nuestro marco jurídico para plasmar y dar vida al contenido de estos acuerdos. En el 2001 se aprobó la primera Reforma Constitucional de Alternancia Política, en la que se plasmó en la Constitución el reconocimiento de las garantías jurídicas y derechos políticos y sociales de indígenas de los indígenas mexicanos.

 

Estos acuerdos dieron pie a una nueva relación del Estado mexicano con las comunidades indígenas. Vale la pena revisar lo logrado y lo que aún siga pendiente.

 

Sí se avanzó en el reconocimiento por parte del Estado con temas de representatividad y servicio como salud, vivienda, caminos y educación.

 

Con reformas particularmente al 2º Constitucional y otras disposiciones sobre el derecho de los pueblos indígenas al libre ejercicio y desarrollo de sus culturas, el acceso a los medios de comunicación, su derecho de consulta, de acuerdo a la protección de los pueblos a la protección de sus sitios sagrados y centros ceremoniales, entre otros.

 

La realidad dicta estos esfuerzos que no han sido suficientes, no podemos hablar en México de una democracia plena mientras haya pueblos excluidos, mientras la pobreza predomine.

 

La tarea aún está inconclusa, estos acuerdos ayudaron en la pacificación del país y aportaron mucho a la dignidad de los pueblos indígenas, pero hoy por hoy hay otros problemas que agudizan más el desplazamiento y la marginación en mi querido Estado de Chiapas, al cual dignamente represento, con la cara levantada y con mucho orgullo.

 

Vivimos una situación de excepción, hoy los grupos del crimen organizado con toda impunidad han tomado el control de mi Estado con extrema violencia, frontera Comalapa, Chicomuelos, Cintalapa, Motozintla, Siltepec, la Concordia y todo mi Estado.

 

El pueblo de Chiapas en total estado de indefensión y vulnerabilidad. Tenemos que enfrentar a los grupos criminales tratando de proteger nuestras comunidades y territorio porque estamos siendo desplazados.

 

Los enfrentamientos de diciembre, La Concordia dieron cuenta que el Estado está rebasado, se habla cerca de 4 mil desplazados en mi estado, implica mayor pobreza, escasez de alimentos, medicamentos y dejar atrás su arraigo, su vivienda por salvar únicamente la vida, en tanto el indolente Presidente de la República, desde su otro México, minimiza el crimen.

 

Chiapas es uno de los Estados más seguros del país y burlándose del dolor, ordena silencio. No nos sorprende, así han sido estos últimos cinco años de ceguera, de incapacidad, de preocuparse más por sus propias carencias y egos, y no vela por las familias de México.

 

Se extraña en México y particularmente en Chiapas, aquel diálogo como el que impulsó los acuerdos de San Andrés Larráinzar a favor de Chiapas debemos buscar la  concordia porque le quitaron la paz, le quitaron el miedo

 

Este 2 de julio recuperaremos la paz, porque Xóchitl es pueblo, adelante Chiapas, adelante México, vivan los acuerdos de San Andrés Larráinzar.

 

Es cuanto Presidenta.  

 

 

 

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