Ciudad de México, 27 de agosto de 2024
TRANSCRIPCIÓN DE LA PARTICIPACIÓN DE LA DIPUTADA LILIA CARITINA OLVERA CORONEL, PARA REFERIRSE AL TEMA DE AGENDA POLÍTICA, “LA SUPREMA VENDE PATRIAS”.
DIPUTADA LILIA CARITINA OLVERA CORONEL (LCOC).- Con el permiso de la Mesa.
Buenas tardes a todos. Nuevamente un título en la agenda política que golpea el nivel de debate legislativo. Nuevamente piensa el Grupo oficialista que está en su plenaria de partido político. Nuevamente van contra las instituciones que se mantienen dignamente en su separación de poderes.
Repruebo firmemente este título de la agenda política. En Cámara de Diputados, en la Mesa Directiva se dio prioridad a la función constitucional, no a politiquerías ni títulos banales. Como ciudadanos o partidos políticos nos seguirá asistiendo el derecho de acudir a las instancias legales que gocen de autonomía en la toma de sus decisiones para defender el atropello de nuestros derechos, la Constitución nos lo garantiza.
Tal y como lo dijeron precisamente ustedes ayer en la comisión de puntos constitucionales, no presionen a las instancias judiciales y respeten sus autonomías.
En esta última sesión de la Comisión Permanente me embargan emociones y sentimientos encontrados. Fue una Legislatura con oposición combativa, con oposición propositiva. Una Legislatura que supo y pudo ser el muro de contención de equilibrio y contrapeso que el México reciente ha necesitado.
Nos vamos con la frente en alto, con la satisfacción del deber cumplido, con la satisfacción de haber defendido a México y segura estoy que la oposición de la 66 Legislatura lo seguirá siendo y lamento profundamente lo que está pasando en cuanto a la Reforma del Poder Judicial, en cuanto a la desaparición de los entes autónomos.
El Poder Judicial de la Federación no merece el trato que le están dando y lo que consumarán en septiembre próximo. México no merece la zozobra nacional e internacional en la que esta reforma nos ha impuesto y a propósito, hoy nos amanecimos con una pausa con la Embajada de Estados Unidos. Qué barbaridad.
México no merece la indiferencia y el trato que se le da a los trabajadores, a los jueces, a los ministros, a los magistrados del Poder Judicial de la Federación.
Tampoco en esta nueva ocurrencia de desaparecer a las instituciones que tanto tiempo llevó a formarlas.
Todo lo que es medición de políticas públicas de transparencia y evaluación les asusta. Era importante fortalecer las instituciones, no abatirlas, era imperioso generar a las instituciones no regenerar a las instituciones, no demolerlas.
Era apremiante asegurar la autonomía de las instituciones, no someterlas. Al diablo con las instituciones. Hicieron suya esa frase al aprobar la desaparición de organismos constitucionales autónomos, nulificando el andamiaje institucional que costó décadas constituirse y que dieran certeza jurídica a tratados internacionales y organismos internacionales que dieron al México moderno presencia y respeto y que hoy lo quieren regresar al México de hace un siglo.
Este es un verdadero ataque a la República, me dueles México. Diputadas y diputados, senadores y senadoras del bloque oficialista creen que tienen la verdad absoluta, creen que pueden menospreciar y faltar al respeto a los mexicanos y mexicanas, como lo están haciendo.
Muchos de nosotros también supimos o crecimos con José Martí, con Simón Bolívar, con el General San Martín, con el Fidel que en principios de sus revoluciones fueron libertadores de países o continentes.
Ustedes les aprendieron las las antítesis. Cuando miren atrás verán el gran desperdicio de oportunidad que tuvieron de servir verdaderamente a México, entonces será demasiado tarde.
Es cuanto, Presidente.