Ciudad de México, 21 de octubre de 2021
TRANSCRIPCIÓN DE LA INTERVENCIÓN DEL DIP. SANTIAGO CREEL MIRANDA PARA FIJAR LA POSTURA DEL GRUPO PARLAMENTARIO DEL PARTIDO ACCIÓN NACIONAL, CON MOTIVO DEL BICENTENARIO DE LA ARMADA DE MÉXICO.
DIPUTADO SANTIAGO CREEL MIRANDA (STM): Señor secretario de Marina, almirante José Rafael Ojeda Durán, sea usted bienvenido a esta casa del pueblo. Igualmente les doy la más cordial bienvenida a todos los almirantes aquí presentes, vicealmirantes, contralmirante, capitán de altura y, de una manera muy especial, quiero saludar a la señora capitán de altura y, por su conducto, extender un saludo a todas las mujeres integrantes de la Armada de México, que nos honran mucho.
Esta es una Cámara auténticamente plural, aquí están representadas todas las fuerzas políticas del país, sus ideologías y sus programas, esa es la nota distintiva de esta soberanía. Pero en este momento, en esta legislatura, señor almirante, tenemos otra gran distinción que es histórica y es la primera vez que ocurre y por eso la quiero mencionar el día de hoy. Es una Cámara paritaria, mitad de diputadas y mitad diputados, cosa que a todos nos honra.
El día de hoy la honorable Cámara de Diputados rinde un merecido homenaje a una institución pilar del Estado mexicano, la Armada de México. Quienes integramos la LXV Legislatura del Congreso de la Unión, nos sentimos altamente honrados en conmemorar un aniversario que marca un hito en la historia de México, los 200 años de la creación de la antigua Secretaría de Estado del Despacho de Guerra y de Marina, como antes se le denominaba.
Esta conmemoración quedará inscrita de manera permanente en letras de oro en el recinto de esta soberanía. A partir de esta fecha, cada vez que levantemos la mirada desde nuestra curul, podremos leer el Muro de Honor, en el Muro de Honor de esta soberanía: 2021 Bicentenario de la Armada de México, lo que nos hará recordar a todos nosotros cuando lo hagamos, esta heroica y noble institución que ha sabido garantizar la integridad nacional, preservar la soberanía del Estado mexicano, la independencia de la República y la defensa nacional de nuestra patria.
El Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional, felicita y hace un reconocimiento a todas y todos quienes han formado parte integrante de la Armada en toda su historia, y que con tanta dignidad han puesto en alto en nombre de nuestra patria. Nuestro respeto y admiración a todos ustedes, quienes han estado presentes, firmes, de manera valerosa para defender la patria cuando ha sido necesario.
La Armada de México es lo que es gracias al sentido de honor de cada mexicana y mexicano que se ha enlistado en sus filas y ha cumplido con su deber. Generación tras generación, la Armada de México ha formado a miles de marinas y marinos, profesionales en las muy diversas tareas que desempeña su institución. Sí, en 1821 fue el año de su consumación, cuando justamente se consuma la Independencia y el comienzo de una nueva era en un México que apenas en aquel entonces nacía.
Poco a poco, en medio de enormes dificultades y de guerras intestinas, siempre en aquel entonces inacabadas, se fue construyendo la nación mexicana y, con ella, sus primeras instituciones. Ese mismo año, en la fecha de consumación de nuestra Independencia, quedó adscrita e inscrita al recién creado Ministerio de Guerra y Marina, el 4 de octubre, teniendo a su cargo todo lo relativo a la defensa de las costas y de los mares nacionales.
El día de hoy conmemoramos a una de las instituciones más antiguas del México independiente. Sus batallas iniciaron antes de que la misma república se constituyera. Recordemos, en este emblemático aniversario del día de hoy, que fue la Armada de México la institución que consuma la Independencia. Ese es su origen, que ha marcado también su glorioso destino.
Habrá que traer a la memoria igualmente que, en 1821, en la guerra contra el Reino de España, ya había terminado en tierra firme, pero no en las costas ni en el golfo, el conflicto ahí seguía latente. Las fuerzas españolas se aferraban a un pasado colonial de más de 300 años de historia. España no se resignaba a perder el territorio novohispano, mantuvo sus posiciones frente a las costas de Veracruz y, en particular, se apertrechó en el fuerte de San Juan de Ulúa, desde donde sus cañones se defendían y defendían el último girón de sus blasones.
El 8 de octubre de 1823, en un acto heroico, con armamento limitado, escasos recursos y un pequeño cuerpo de marinos mexicanos se decretó el bloqueo naval de la fortaleza de San Juan de Ulúa, con el ánimo de terminar con aquel último reducto español que con fiereza estaban todavía defendiendo.
El entonces secretario de Guerra y Marina, el general José Joaquín Guerrera, quien después fungió como presidente de la República, en aquel entonces expresó: “Habiendo cambiado el aspecto de la guerra, a la Marina solo le toca consumar esa grande obra y consolidar para siempre la Independencia nacional”.
Al año siguiente y un mes después de haberse constituido la república, el 29 de noviembre de 1824 nació, para la honra de nuestra patria, la primera generación de cadetes del Colegio de Marina en Tlacotalpan, Veracruz.
Fue hasta el año siguiente, el 23 de noviembre de 1825 que la Fuerza Naval Mexicana, después de 4 años de ocupación y resistencia española, finalmente obtuvo la victoria. Los integrantes de este último reducto español capitularon y procedieron a realizar su desalojo definitivo. Ese día la Bandera mexicana fue izada en todo lo alto en el fuerte de San Juan de Ulúa, siendo desde ese momento nuestra Bandera estando izada hasta el de hoy.
En esa gesta habría que recordar el capitán de fragata Pedro Sáinz de Baranda, cuyo nombre también se encuentra inscrito en letras de oro en el muro de honor de esta soberanía, precisamente para recordar ese hecho histórico.
Ahora, su nombre junto con el de la Armada de México van a estar inscritos, indisolublemente unidos en el Muro de Honor de esta soberanía, precisamente por ello se pusieron en las columnas de orden simétrico. Ahí estarán y estarán por siempre en esta soberanía.
Baste recordar algunas gestas ocurridas en el siglo XIX, como lo fue el desplante de los barcos nacionales en el Golfo de México ante el conflicto separatista de Texas en 1832; la defensa de San Juan de Ulúa durante la intervención francesa de 1838 o la defensa del baluarte de Santa Barbara en Veracruz por la invasión norteamericana en 1846 y 1847, entre otras gestas históricas de nuestra Armada.
Y ya en el siglo XX, durante la Revolución Mexicana, el 21 de abril de 1914 recordamos la resistencia de los heroicos cadetes de la Escuela Naval, junto con el pueblo de Veracruz, que defendieron la plaza y el embate en la segunda invasión estadounidense.
En nuestra Carta Magna de 1917, que fue la nueva base jurídica de la organización del Estado mexicano que nos rige hasta el día de hoy, en su artículo 32 estableció con toda claridad los requisitos para pertenecer a la Marina Nacional de Guerra, para que solamente pudieran integrarse aquellos mexicanos que hubiesen nacido en el suelo patrio. En 1939 se creó el Departamento de Marina y el Estado Mayor Naval, que abrió puerta a la creación de la Secretaría de Marina el 31 de diciembre de 1940.
Estos antecedentes históricos dan cuenta de una institución que ha sido capaz de permanecer vigente en el correr de sus primeros dos siglos de vida. Se trata de una de las instituciones baluartes de la patria, sin la cual no podríamos hoy concebir la vida independiente de nuestra nación.
Hablar hoy de la Armada de México es referirnos a una de las instituciones que, por su lealtad indiscutible, por su honorabilidad y patriotismo, cuenta con la confianza plena de mexicanas y mexicanos que día a día reconocen su heroica labor.
Aprovechamos la ocasión para reconocer la formación de los profesionistas que tiene, que son de excelencia, por parte de la Escuela Naval Militar que instruye a los marinos en las muy diversas áreas de especialización con que cuentan.
La Marina tiene encomendada la protección de alrededor de 11 mil 122 kilómetros de nuestros litorales, además de todo lo que son los cuerpos hidrológicos de nuestro territorio. Es de destacar la participación de los marinos en situaciones de desastres naturales que todos, mexicanas y mexicanos reconocemos, y su denodada solidaridad para ayudar las personas y familias afectadas. Hace apenas unos días volvimos a constatar la valía y el compromiso que tienen con México.
También habrá que reconocer su participación y hacerlo de una manera muy excepcional, que ha tenido la Armada en el combate al crimen organizado. Y digo excepcional porque esa labor es una labor propia de la seguridad pública y por lo tanto es excepcional la participación de la Armada de México, en tanto que la fuerza civil, la fuerza policial civil que debe estar a cargo del gobierno federal civil, de los gobiernos estatales civiles, de los gobiernos municipales civiles, puedan enfrentar eficazmente esa situación y como lo mandata la norma transitoria de nuestra Constitución, que la tenemos muy presente.
En Acción Nacional estamos dispuestos siempre a fortalecer a las instituciones de México y en particular a quien hoy estamos aquí homenajeando. Cuenten con ello, cuenten con todas y todos nosotros quienes integramos el Grupo Parlamentario de Acción Nacional, para respaldar a la Armada de México en los términos que lo establece nuestra Constitución y los tratados internacionales que México es parte.
La Marina ha estado ahí siempre presente para apoyar a la población cuando lo necesita, extendemos nuestro más sincero agradecimiento y reconocimiento a todas y a todos quienes han entregado su vida para servir a México.
Queremos hacer un especial reconocimiento, nuevamente, a las mujeres que se han enlistado en las diferentes áreas de la Armada y que hoy llevan a cabo la nobilísima tarea de procurar la paz y la seguridad de todos los mexicanos, su valentía y dedicación, así como su determinación y coraje son fuentes de inspiración y respeto para todas y todos los mexicanos, ustedes son ejemplo para el pueblo de México.
Felicidades a la Armada de México por estos primeros 200 años de vida. Larga, muy larga vida tenga nuestra Armada de México. Muchas gracias.
---oo00oo---