Ciudad de México, a 13 de noviembre de 2021

TRANSCRIPCIÓN DE LA INTERVENCIÓN DEL DIPUTADO MARIO GERARDO RIESTRA PIÑA, PARA PRESENTAR SUS RESERVAS AL DICTAMEN CON PROYECTO DE PRESUPUESTO DE EGRESOS DE LA FEDERACIÓN PARA EL EJERCICIO FISCAL DE 2022.

DIPUTADO MARIO GERARDO RIESTRA PIÑA (GRP): Con su venia, presidente. Esta es la vaquita marina, una especie mexicana, 100 por ciento mexicana, en peligro de extinción. Es una especie amenazada y por ello se le considera prioritaria.

Según especialistas tenemos en nuestras aguas nacionales apenas 10 ejemplares de esta especie, en este caso el tiempo es crucial, no podemos quedarnos en la inacción. De no actuar rápido el daño será irreversible y una vez extinta esta especie no habrá nada que podamos hacer. Y aun a pesar de ello, el programa para la protección y restauración de ecosistemas y especies prioritarias, por tercer año consecutivo contempla un recorte.

En los últimos tres años han quitado 140 millones de pesos para este programa y, si comparamos el presupuesto propuesto para el 2022, con el que tenía en 2020, la reducción asciende a 140 millones de pesos, el 80 por ciento, al pasar de 174 millones, apenas a 34 millones de pesos. Esto es una verdadera vergüenza.

Según el Centro Mexicano para el Derecho Ambiental, el proyecto de Presupuesto 2022 estima que solo se estarían destinando 2 pesos para la protección de las especies en peligro de extinción por cada hectárea. Una verdadera vergüenza.

Y no se trata solamente de la vaquita marina, se trata del lobo mexicano. Y ahí los legisladores de Chihuahua y de Sonora, por ejemplo, tendrían que interesarse. Se trata del águila real, nuestro emblema nacional, que también está seriamente amenazado. Y se trata de otras especies como el ajolote de la laguna de Alchichica. Todas estas especies se encuentran en peligro de extinción.

Y, sin embargo, el Partido Verde guarda silencio. El Partido Verde guarda un silencio cómplice que ya no le extraña a nadie. Es el único Partido Verde en el mundo a favor de la pena de muerte. Se dicen ecologistas, pero están a favor de una reforma que cierra las puertas a las energías limpias. Y se dicen ambientalistas y animalistas, y están condenado a la vaquita marina a la extinción.

Los reto a que voten a favor del medioambiente y a favor de la vaquita marina. En esta votación vamos a ver si el Verde Ecologista está del lado del medioambiente, o si lamentablemente permanece del lado de la lambisconería legislativa.

Ya les hemos recomendado en el pleno que lean sus propios estatutos. Y, por si no lo han hecho, déjenme decirles que el propio Partido Verde estipula como causal de expulsión a aquellos que tomen decisiones y que dañen irreversiblemente el medioambiente.

Por el bien de México, primero la vaquita marina. Es cuanto, señor presidente.

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