Ciudad de México, a 10 de febrero del 2022

TRANSCRIPCIÓN DE LA INTERVENCIÓN DE LA DIPUTADA DIANA ESTEFANÍA GUTIÉRREZ VALTIERRA, CON MOTIVO DEL 75 ANIVERSARIO DEL RECONOCIMIENTO DEL VOTO DE LA MUJER A NIVEL MUNICIPAL, DURANTE LA SESIÓN ORDINARIA DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS

DIPUTADA DIANA ESTEFANÍA GUTIÉRREZ VALTIERRA (EGV): Compañeras y compañeros.

Hace 75 años las mujeres mexicanas pudieron por primera vez saberse ciudadanas en nuestro país.

Han pasado 75 años desde que comenzó un lento, pero constante y necesario reconocimiento de lucha, trabajo y compromiso de las mexicanas en favor de la democracia.

El 12 de febrero de 1947 se estableció en la Constitución que las mujeres en igualdad de condiciones pudieran votar y ser votadas en elecciones municipales. Este hecho, por supuesto, abrió el camino para que tan sólo seis años después, este derecho femenino se extendiera a las votaciones federales.

Durante más de siete décadas, las mujeres han trabajado con tesón y valentía para fortalecer el diálogo democrático, la inclusión y la equidad, prueba de ello es la señora Norma Villarreal Bell. Norma estuvo al frente del Gobierno de San Pedro Garza García en Nuevo León de 1967 a 1969, convirtiéndose así en la primera alcaldesa de aquel municipio y del Partido Acción Nacional en todo México y quien fue reconocida por su gran labor social y compromiso con los niños y niñas de ese entonces.

Año más tarde, en 1979, Griselda Álvarez Ponce de León se convertiría en la primera gobernadora en la historia de México, abriendo así el camino que hoy miles de mujeres pueden recorrer para tener una vida activa y plena en cargos de elección popular.

Estos testimonios de valentía y tenacidad, nos recuerda la urgencia de seguir apostando por la igualdad y la equidad, pues sólo así podemos construir una sociedad más consciente, participativa y dinámica.

Actualmente poco más de un tercio de los municipios son dirigidos por mujeres. Así que, a 75 años de iniciar esta cruzada por la igualdad, todavía queda mucho por hacer, mucho para estabilizar la balanza de género; sin embargo, en México se han obtenido grandes conquistas en nombre de la inclusión de género, y prueba de ello lo somos en esta Legislatura, el 50% somos mujeres.

Debemos señalar que aún vivimos en un país en el que la sombra de la violencia, la discriminación y la violación a los Derechos Humanos de las mujeres siguen presentes.

Por eso, a 75 años de aquel primer paso democrático, no podemos dejar de insistir en la necesidad de seguir derrumbando los estereotipos y los prejuicios que aún están vigentes.

Por ello les digo que hay que seguir apostando al trabajo conjunto, colaborativo y abierto a los conocimientos y experiencias de otras mujeres.

Concluyo recordando las palabras de la defensora francesa Simone de Beauvoir, quien nos sigue hablando a las mujeres de hoy con la misma fuerza y luminosidad con las que lo hizo en su época: “Que nada nos limite, que nada nos determine, que nada nos defina y que nada nos sujete. Que la libertad sea nuestra propia sustancia”.  Así, las mujeres mexicanas y las mujeres de Acción Nacional apostamos por hacer de la libertad la auténtica sustancia de nuestro destino.

Es cuanto.

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