Ciudad de México, a 26 de noviembre de 2024
INTERVENCIÓN DEL DIPUTADO FRANCISCO PELAYO COVARRUBIAS, PARA REFERIRSE EN CONTRA DEL DICTAMEN QUE EXPIDE LA LEY DE INGRESOS DE LA FEDERACIÓN PARA EL EJERCICIO FISCAL DE 2025.
DIPUTADO FRANCISCO PELAYO COVARRUBIAS (FPC): El octavo transitorio de la Ley de Ingresos para el Ejercicio Fiscal de 2025 establece que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a través del servicio de administración tributaria debe publicar estudios sobre la evasión fiscal en México. Dichos estudios deberían de elaborarse con la participación de instituciones, centros de investigación y organismos especializados promoviendo una visión integral y objetiva sobre este grave problema en nuestro país.
Sin embargo, en este gobierno hemos presenciado el desmantelamiento de organismos autónomos que en el pasado garantizaban transparencia y supervisión en el uso de recursos públicos. Este debilitamiento no solo afecta a la rendición de cuentas, sino que también deja a la ciudadanía sin mecanismos efectivos para combatir la corrupción y proteger la hacienda pública, para proteger nuestra democracia.
En Acción Nacional no claudicaremos en nuestra defensa de la transparencia, de la rendición de cuentas y el fortalecimiento de nuestra democracia. Estos valores son esenciales para enfrentar los retos económicos y sociales que afectan a millones de mexicanos y mexicanas.
Hablemos ahora de quiénes sostienen nuestra economía, los emprendedores, las mujeres trabajadoras, los dueños de pequeños negocios, talleres y tiendas, y todos aquellos que con un esfuerzo diario buscan construir un mejor futuro para sus familias.
Este sector que constituye el motor económico de nuestro país ha sido olvidado desde hace seis años por un gobierno que ha priorizado políticas que no estimulan la inversión ni generan las condiciones para la prosperidad.
En este contexto la inflación sigue golpeando a las familias mexicanas. Los precios descontrolados de bienes y servicios son un claro reflejo de una economía que carece de crecimiento sostenido, competitividad y empatía hacia quienes desean invertir en nuestro país.
En el caso de Baja California Sur, mi estado, el problema es especialmente preocupante, nuestro estado enfrenta un abandono histórico que limita el poder adquisitivo de sus habitantes y frena el desarrollo económico y la infraestructura.
Además, siendo una entidad que compite directamente con mercados del vecino del norte y es el estado que más paga por todo. Paga más cara la energía, paga más caros los combustibles, paga más caros los fletes, paga más caros los insumos de producción, paga más caros los insumos de consumo humano. Es indispensable, sin duda, compañeros diputados, nivelar las condiciones para fortalecer nuestra competitividad regional.
Por ello, mi propuesta incluye la implementación de estímulos fiscales y la reducción del IVA al 8 %, o mínimo al 11, como estábamos antes. Este cambio sería un motor para combatir la inflación, al reducir costos que beneficiarían directamente a las familias y pequeños negocios sudcalifornianos.
Pero cómo queremos beneficiar a todos los mexicanos o a los sudcalifornianos si el sexenio pasado se endeudó con 6.6 billones de pesos. Deuda que heredaron a todos los mexicanos y ahora, este nuevo gobierno comienza endeudando a la siguiente generación de mexicanos con 1.6 billones de pesos más.
Ya voló la deuda que, por cierto, es la más alta de los últimos 30 años, más allá de ese globo, más allá, incluso, de las nubes. Esta Ley de Ingresos no es un instrumento adecuado para enfrentar los retos económicos actuales. En lugar de fomentar el crecimiento y proteger a los sectores más vulnerables, perpetúa un sistema regresivo que frena el desarrollo productivo, desincentiva la inversión y carga de manera desproporcionada a quienes menos tienen.
En Acción Nacional estamos comprometidos con el bienestar de todas y todos los mexicanos, quienes merecen mejores oportunidades para crecer y para prosperar, es por ello, que votaremos en contra la Ley de Ingresos, que no genera confianza, mucho menos bienestar, mucho menos prosperidad. Es cuanto. Buenas tardes a todas y todos.
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